Con participación de la comunidad universitaria, funcionarios, legisladores y familias, se celebraron los actos en ambas ciudades. En Paraná, la residencia está destinada a estudiantes de las Facultades de Ciencias de la Educación, Ciencias Económicas y Trabajo Social.
A través de estas obras, UNER consolida sus políticas de bienestar estudiantil, para que más jóvenes de la provincia puedan ingresar, permanecer y graduarse en la universidad pública. Los actos que tuvieron lugar este viernes 2 de agosto fueron presididos por el rector Andrés Sabella junto a Rosario Romero y César Clement, intendentes de Paraná y Oro Verde respectivamente. En ese marco, las y los estudiantes residentes, que fueron seleccionados a través de convocatorias, recibieron sus llaves y firmaron los acuerdos para habitar estos espacios.
“Estas son obras que la universidad lleva adelante con fondos propios. Y eso es posible porque tenemos una universidad que es ordenada, y que toma estas decisiones en su Consejo Superior, que prioriza las necesidades de equipamiento e infraestructura. Este tipo de obras construye comunidad, por eso el espacio está pensado de determinada manera. La universidad necesita generar políticas de bienestar estudiantil. Tenemos algo más de 25 mil estudiantes, más del 95% son entrerrianos. Y en cada una de las facultades, cerca del 50% son del interior, es decir, no provienen de la localidad en la cual vienen a estudiar. Y por eso este es un tema realmente muy importante”, expresó el Rector.
Acerca de las obras
En Paraná, la residencia está destinada a estudiantes de las Facultades de Ciencias de la Educación, Ciencias Económicas y Trabajo Social. Esta obra salda una demanda histórica para la Universidad, que podrá dar respuesta a quienes eligen estudiar en la UNER y deben mudarse hacia la capital entrerriana. Se construyó con fondos propios, en un terreno donado por la Municipalidad de Paraná a través de la Ordenanza N° 9961. Con una superficie cubierta, brindará alojamiento a 31 personas, en un bloque que cuenta con planta baja y tres pisos.
Las residencias de Oro Verde, en tanto, suman plazas y amplían espacios, con una puesta en valor que permite alojar mayor cantidad de estudiantes y, además, mejora las condiciones edilicias. En el mismo terreno se construyó un nuevo edificio con espacios comunes de uso: cocina, salón comedor-SUM y lavadero.